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Creer y crear

 






Futuro

Martha Laredo Jiménez

 

                                            

En mi vida de polvo

No sabré que fui yo

tendré vida de viento

mente de vuelo.

Tal vez

 

En mi vida de huesos

no sabré que fui yo

tendré vida de tierra

mente de campo.

una fisura

 

En mi vida de sangre, seca ya

no sabré que fui liquida

tendré vida de agua

mente fluida.

da la pauta.



Foto por Liz Echeverría

Variaciones

Liz Echeverría

 

En lo profundo de mi mente,

inundada de pensamientos frívolos,

emblanquece el alma desolada.

 

Encuentro de misterio

que desnuda el sentimiento,

lo lleva al borde,

a la demencia, 

al desenfreno.

 

Dibujas mis deseos,

avalancha de emociones,

vicio,

locura entrañable por tu desnudez:

grito desesperado en el silencio,

convertido en nostalgia

por haber nacido tarde,

el optimismo se disuelve,

se convierte en nada.



Chico campesino. Santiago del Estero 1970
Fotografía por Carlos Bosch

Con los pies descalzos

Erick Alberto López Ruiz

 

Llegaremos a lo inimaginable

Dónde lo rojo serán uvas saladas

El irreal unicornio volará por todo el mar

Viajemos por el hondo paisaje de ballenas

 

¿Te gustan las gaviotas nadando en la mesa?

Prefiero zambullirme en mantequilla

Como soldados de plástico hagamos un picnic

Veamos el anochecer con esa luna verdosa sin igual

Descubramos el final del hilo

Tú en tu disparate y yo en mi calma

Espero verte... O quizá no porque ya sabes

No todos saben llegar

No todos conocen la salida

O incluso la hora, es muy importante

Si te pasas, vuelve a intentarlo la siguiente

 

Con los pies descalzos

Todo está en ti si será invierno o verano

El brillo será tu corazón y el paisaje tu cerebro

Uno con el otro lo real será aburrido

¿Extrañar?

Eso es agua de otro saco

Verás lo que verás y sentirás como el ayer se juntara al mañana

Qué bonito suena ¿Verdad?



Seis naranjas. Van Gogh

Cítrica

Galia Luna de Abril

 

Redonda, turgente.

orgánica y seductora,

te tomo entre mis manos,

te miro, te huelo y te giro.

 

Te llevo a la boca suave y jugosa,

tu piel  se enciende  en colores vibrantes.

 

Te saboreo despacio,

mientras desprendes tu aroma intenso

brota una brisa suave en tu piel,

impregnandome de ti.





Una flor

José Abiud

 

Cultivada

en el jardín

de la esperanza,

donde abundaba

la tranquilidad, la paz

y la armonía.

 

Vientos de alegría

a la bella flor mecían,

que cándidamente

ella agradecía.

 

En su ternura,

solo sonrisas y brillo

de sus pétalos regalaba.

 

Afuera

cual sombra maligna,

agazapada

en la mente oscura

del pensamiento,

la infamia esperaba,

solo esperaba.

 

¡Por qué

no callas el silencio

con voz sonora!

dale vida

a esta alma,

que la nostalgia

y la congoja devora.

 

¡Calla!,

no digas más,

la flor está tendida.

 

Se ahoga en el infinito

el reclamo hirviente,

¿A esto, le llamas vida?

 

El dolor eterno será,

solo queda

humedecer el rostro,

con los ríos

de la impotencia.

 

El jardín fue mancillado

una fría mañana,

una triste alborada,

la tierna flor

de su hogar

fue arrancada.

 

Triste jardinero,

fría su mirada

perdida en el espacio,

cruel contraste

con las luces

de la temporada.

Sigue buscando

en su huerto

la flor adorada.

 

No es tristeza es…

…ausencia de alegría.

 

¡Silencio!

no quiero decir más,

la flor está tendida.


Mujer con paloma. Óleo sobre lienzo (1610-1620).
Cecco de Caravaggio


Como paloma

María Erato

 

En busca de un abrazo

voy a volar,

cruzaré el infinito

vistiendo las alas de paloma

que tanto te gustan,

el pico agradecido de noble ave,

las patas listas

para posarlas y llegar

a donde dar un abrazo

no esté prohibido,

donde el canto ambarino de los gorriones

adorne las azoteas.

Diluyendo la palabra discriminación

seré otra,

ante un cielo despejado, sin fronteras.



Encrucijada por Lázaro Blanco (1976). D. F. (Ahora CDMX)


Desencuentro

Flor de María Ruiz López

 

Cruzamos nuestros caminos,

casi rozamos nuestros hombros,

compartimos aceras sin saberlo

disfrutamos el mismo cielo azul,

las mismas aulas y la lluvia.

 

Entre un mar revuelto nadamos,

luchamos y entregamos el corazón, 

no coincidimos, no hubo un lazo de unión.

 

El viento revuelto nos cegó,

de pronto la venda cayó

nos encontramos frente a frente

en una tarde lluviosa y sin razón.




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